La oposición avanza pero Berlusconi resiste
A pesar de que el Partido Democrático, PD, liderado por Pierluigi Bersani se ha impuesto en 7 de las 13 regiones donde se celebró la votación, es el Partido del Pueblo de la Libertad, PDL, del primer ministro Silvio Berlusconi y sus socios de ultraderecha, la Liga del Norte, LN, que es la formación que más avanza con casi un 13% de los votos a nivel nacional, quienes han logrado una mayor rentabilidad política en las elecciones regionales y administrativas italianas celebradas el domingo, 28 de marzo y el lunes 29, respectivamente. (Ministerio del Interior)
El ascenso de la coalición de gobierno, tras los escándalos públicos y privados en que se ha visto involucrado Il Cavaliere en los últimos meses, debe atribuirse al significativo aumento de la Liga, una formación de corte federalista y xenófoba liderada por el actual ministro de Reformas, Umberto Bossi, que sólo presentaba candidaturas en el centro y norte del país, donde gana mucho terreno.
La oposición de centroizquierda, comandada por el PD, obtuvo el triunfo en Liguria, Emilia Romaña, Marcas, Umbría, Toscana, Apulia y Basilicata pero perdió los históricos bastiones “rojos” de Calabria, Campania, Lacio y Piamonte, mientras que el centroderecha, que gobernaba en sólo 2 de las 13 regiones en liza, Lombardía, con su importante capital Milán, y Véneto, se anota un total de 6 una vez contabilizados los resultados de unas elecciones marcadas por una fuerte abstención según datos provisionales facilitados por el Ministerio del Interior.
De los 41 millones de ciudadanos llamados a las urnas tan sólo ejerció su derecho al voto el 63,6% de la población, lo que quiere decir que uno de cada tres italianos no participó en la votación, registrándose la concurrencia más baja desde la instauración de la república en 1946.
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